Cuando Pepe Prado me informó de la audiencia privada con sus Santidad, vinieron a mi muchos sentimientos y recuerdos. Tantos rostros, tantas comunidades, tantos viajes, tantas ausencias en casa, tantos vacíos y tantas satisfacciones, tantos hermanos en la fe y algunos enemigos también.... fui a la capilla que tenemos en la Oficina Nacional y doblé mis rodillas frente a Jesús para agradecerle esta maravillosa oportunidad para la Escuela San Andrés.
Durante mucho tiempo Dios nos ha concedido evangelizar en su nombre, y todo lo que he vivido junto a mi familia y hermanos en la fe, ha sido maravilloso aunque no siempre fácil. Ahora tendría la oportunidad de estrechar la mano de Pedro, ver sus ojos y escuchar de su boca, cómo me confirmaba en la fe, y con esto sentir que ha valido la pena.
Frente a mi había un gran desafío por sortear para lograr asistir a esta reunión, el económico. Como buen misionero, no había "plata" pero si mucha fe y también muchos hermanos y hermanas que conocen nuestro corazón y por lo tanto me di a la tarea de pedir ayuda.
Dios tocó los corazones de muchos hermanos y hermanas en la fe y logré juntar el dinero para el viaje.
Una situación que empañó este viaje fue no poder ir con la persona que más amo después de Jesús y que ha estado conmigo en la buenas y en las malas. Mi amada esposa Maribel, ella lo merecía más que yo, sin embargo los caminos de Dios no eran como los míos y no me fue posible lograr que este momento fuera la culminación de toda una vida como matrimonio evangelizador..... acepto eso Dios.... y Gracias Mary!!!
Resumiendo, para mi estrechar la mano del Papa, fue estrechar la mano de toda la Iglesia. Un signo de comunión plena y permanente.
Fue reconocer de mi parte que "Pedro" ha recibido de Jesús la autoridad y la potestad y que nosotros "Andrés" estamos felices de que así sea.
Y también fue el contacto con la sencillez, la serenidad, el buen humor, la sabiduría y el calor fraterno de un hombre que está enamorado de Jesús y apasionado por la Buena Noticia.
Dios te bendiga Francisco!!!
Alabado sea Jesucristo
Dexter Reyes
Director de EESA México
