Uno de los momentos más hermosos durante la Audiencia Privada de Escuela San Andrés con S.S. Francisco fue la oración que P. Luis Alfonso Zepeda dirigió al Papa.
La compartimos con ustedes con la intención de que todas las Escuelas San Andrés la oren en sus comunidades por lo menos una vez al mes.
¡Oremos por el Santo Padre!
ORACIÓN POR EL PAPA
Uno de los momentos más hermosos durante la Audiencia Privada de Escuela San Andrés con S.S. Francisco fue la oración que P. Luis Alfonso Zepeda dirigió al Papa.
La compartimos con ustedes con la intención de que todas las Escuelas San Andrés la oren en sus comunidades por lo menos una vez al mes.
¡Oremos por el Santo Padre!
Santo Padre:
En la última cena, Jesús le dijo a Pedro: “Simón, Simón, mira que satanás ha solicitado el poder cribaros como trigo; pero yo he rogado por ti para que tu fe no desfallezca. Y tú, cuando hayas vuelto, confirma a tus hermanos”.
Jesús siempre ora por ti, Santo Padre; sabemos que nunca estás solo, pues te acompaña la oración de Jesús y la de su Iglesia. Hoy queremos orar junto con Jesús, para que tu fe nunca desfallezca y para que nos sigas confirmando a nosotros tus hermanos, especialmente a esta escuela de evangelización, en la fe y en la caridad a Jesús.
Para que como Pedro en el momento en que muchos lo abandonaron, le sigas diciendo con firmeza y convicción profunda, a nombre de todos y de esta escuela de San Andrés: “A quien iremos, Señor, solo tú tienes palabras de vida eterna”. Roguemos…
Para que cuando subas a la montaña alta como Pedro, nos lleves contigo y nos enseñes a ver con ojos siempre nuevos la gloria de Jesús y a escuchar la voz del Padre, para estar siempre dispuestos a obedecerle. Roguemos…
Para que cuando Jesús nos siga preguntando: “¿Quién dice la gente que soy yo? Le respondas a nombre de todos, iluminado por la revelación del Padre: tú eres el Cristo, el Hijo del Dios vivo.” Roguemos…
Para que Dios siga dando firmeza y consistencia a la roca sobre la que edificó Jesús su Iglesia y que de acuerdo a su promesa, las puertas del hades nunca prevalezcan contra ella. Roguemos…
Para que con las llaves del Reino de los Cielos, que Jesús ha dado a Pedro, sigas abriendo a todos, las puertas de la misericordia de Dios. Roguemos…
Para que como Pedro, cuando Jesús le pregunto si lo amaba, no te canses de decirle, a nombre de todos y de nuestra escuela de evangelización: “Señor, tu sabes todas las cosas, tu sabes que te quiero”. Roguemos…
Para que sigas apacentando con amor los corderos y las ovejas de Jesús, que El mismo te encomendó. Roguemos…
Conclusión:
Padre bueno: al orar por nuestro hermano el Papa Francisco, te pedimos le concedas tres regalos: el primero, la alegría del Evangelio, manifestada en su sonrisa y que es fruto del gozo que produce el amor de Dios; en segundo lugar, la pobreza y la sencillez de vida que son signos ciertos de la identidad de Jesús y de su Iglesia; y por último, que sigas llenando su corazón de misericordia manifestada a través de gestos proféticos que nos hacen sentir el amor del Dios bueno.
Virgen de Guadalupe, Madre Nuestra, recuérdale siempre al Papa que nunca está solo, sino que está en tu regazo y que corre por tu cuenta. Amén.
Ahora todos juntos, recemos la oración que nos enseñó Jesús:
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.
Ahora nos encomendamos a su oración y le pedimos nos bendiga.
*P. Luis Alfonso Zepeda*